lunes, 30 de junio de 2014

La Familia...

Uno muchas veces no dimensiona lo interesante que puede llegar a ser tu propia familia. Damos por sentado en ocasiones, que nuestra familia no es tan especial como las que vemos en televisión. Pensamos que la nuestra es tan común y corriente que lo que pasa dentro de ella, pasa en todas partes. Creemos que lo que sabemos es suficiente y que no hay nada mas por hablar, decir, contar, averiguar, descubrir pero en medio de las cenas, los almuerzos, los desayunos y las meriendas, nos encontramos con realidades tan diversas como vastas, tan llamativas, peculiares, secretas, simpáticas y únicas. Y repentinamente como si una bomba explotara nacen las interrogantes siguientes: En serio tu vida..? Me estas jodiendo..? Pero si eso yo no lo sabia?! Porque nunca me lo dijeron..? En que época paso..? Y un montón de preguntas mas que obviamente en solo un almuerzo, una cena, un desayuno y una merienda no alcanzan para llenar los vacíos en todas las historias que pensábamos conocíamos o creíamos conocer.

Las reuniones familiares, suelen ser tediosas, alegres, formales, de apoyo o informativas, y varias formas mas, pero las que son del tipo charla informativa llaman mucho la atención. Es increíble lo que uno puede llegar a saber en solo 1 minuto, no solo de la boca de tus propios padres con quienes viviste toda tu vida y a quienes pensabas conocer, sino de las aventuras de las que tus tíos o abuelos fueron participes.

Quien iba a decir que uno de mis antepasados fue uno de los primeros pocos fotógrafos del Paraguay..? O que uno de ellos fue un general y capitán..? Quien iba a decir que en su juventud mi abuela montaba a caballo o que mi abuelo arreaba animales hasta la frontera también montando un corcel..? Y esas historias son solo una mínima parte de lo que puedo comentarles, pero se imaginan cuantas cosas existen dentro de cada una de las familias del mundo entero..? Cosas que sabemos que son pequeñas en comparación a lo que realmente desconocemos.

En mi familia siempre hablamos de cosas como la importancia de la sangre, el apoyo entre hermanos, que jamas hay que darle la espalda a la familia porque al final son ellos los que siempre están allí para nosotros sin importar lo que hagamos. Lo que me lleva a una frase que me dijo creo que mi madre:

-"Si una pareja se divorcia se vuelven extraños, pero la relación entre hermanos y con tu familia es para siempre y dura toda una vida"...

Lo que me lleva a pensar en lo siguiente que de alguna forma siempre lo termino hablando con mis amigos. La familia siempre va a estar allí para vos, la pareja puede ser importante, pero la familia siempre tiene que tener su lugar le moleste a quien le moleste. Y así como tienen su lugar, también deben de saber hasta que punto llega su territorio sin ser un motivo negativo que limite el desarrollo de uno. Eso implica saber que pueden contar con nosotros, pero en cuestiones de sueños y anhelos de crecer y avanzar, aunque les moleste, también debemos de contar con su apoyo.

Así como existen las familias de sangre, también existen las familias de corazón o las que adoptamos con el tiempo, entre los que se encuentran amigos que mas que amigos se convierten en una especie de hermanos perdidos, tíos, tías, abuelos y abuelas, todos con un común denominador, la vida los puso en nuestro camino y permanecen con nosotros. Tal vez no los veamos muy seguido pero sabemos que están allí siempre, en espíritu y con mucho cariño para nosotros y que sabemos que con ellos podemos contar para cualquier situación en las que estemos metidos.

Las familias son en cierta forma parecidas, pero muy diferentes a la vez. Debemos de valorarlas y respetarlas, no solo como un centro cálido donde podemos refugiarnos, porque es verdad, es bueno tener donde esconderse y sentirse tranquilos y protegidos, en donde siempre sos bienvenido, en donde lo que sabes hacer no molesta y que el daño que generas se tolera. Aprender a valorar lo que es la familia, no solo como conjunto sino a cada una de las partes que lo conforman.

De ser posible dar paso al dialogo, al compartir, al chistear y al bromeo, todo siempre apagando el teléfono celular  y dejando de lado la notebook y estar realmente presentes con ellos, porque aunque no lo creas, hasta el amargado de la familia tiene historias muy buenas para contar y que aunque no lo quieras aceptar te pueden servir a vos como experiencia.